La Superintendencia Nacional de Salud realizó una auditoría en una bodega de Audifarma en Bogotá, donde encontró 113 mil unidades de insulina y otros medicamentos que figuraban como “pendientes” para los pacientes. Tras este hallazgo, ordenó trasladar en un máximo de 24 horas los fármacos a los puntos de dispensación.
Audifarma afirmó en un comunicado que la situación es “completamente normal” y que los medicamentos son distribuidos de manera transparente. Explicó que opera con una bodega centralizada desde donde se despachan productos a todo el país, por lo que algunos medicamentos pueden estar en proceso de recepción o despacho.
Asimismo, señaló que la deuda pendiente con los gestores farmacéuticos, que asciende a 4 billones de pesos, genera intermitencias en el abastecimiento. La empresa aseguró que mantiene su compromiso de entregar los medicamentos de manera eficiente y oportuna a los usuarios del sistema de salud.
